El año 2009 pasará a la historia como un año muy complicado y difícil para muchas familias españolas. La crisis económica y el paro se han cebado especialmente entre los trabajadores, los autónomos y las pymes.
En el mes de noviembre hemos vuelto a tener un nuevo record histórico de paro, según fuentes oficiales 60.593 personas han engordado las cifras de parados en toda España. Para que nos hagamos una idea, los nuevos parados del mes de noviembre equivalen prácticamente a casi toda la población de una ciudad como Castelldefels que tiene alrededor de 62.000 habitantes. ¡Se dice pronto!
Cataluña lidera el paro nacional de noviembre con 11.802 nuevos parados, y las últimas cifras de desempleo en Castelldefels nos aproximan a 4.000 personas que están buscando trabajo. Un cifra preocupante, y que si buscamos en las hemerotecas es casi imposible de superar. Estamos en porcentajes de paro sólo superados en tiempos de Felipe González, pero ni siquiera entonces, el paro alcanzó a tantas personas en Castelldefels como ahora con el gobierno de Zapatero.
Sin embargo, toda la culpa no es de Zapatero, también sus compañeros de partido, el Sr. Montilla y el ilustre Alcalde de Castelldefels son copartícipes del proceso de involución que padecemos. Mientras que gran parte de Europa y Estados Unidos comienzan a remontar el vuelo, los gobiernos socialistas de España, Cataluña y Castelldefels miran para otro lado. Si estás parado te preguntarás: ¿a quién han contratado para las obras del famoso Plan-E? ¿Cuántos vecinos de Castelldefels han dejado el paro para trabajar en las obras del Plan de Zapatero en el Canal Olímpico, Gran Vía Mar o de la Calle de la Iglesia?
Y si con el paro no tenemos suficiente, ¿qué hacen nuestros queridos gobiernos? Subir los impuestos a los que todavía seguimos cotizando. Así que, lamentablemente, para el año que viene nuevos récords nos esperan. ¡Qué la suerte nos acompañe!
domingo, 27 de diciembre de 2009
lunes, 30 de noviembre de 2009
El Partido Popular de Castelldefels propone bajar los impuestos
Ya se han debatido en el Pleno del Ayuntamiento de Castelldefels los impuestos y el presupuesto que nos regirán el año que viene. En un contexto económico como el actual, donde miles de familias sufren grandes problemas para poder llegar a final de mes, lo responsable es estar del lado de los más desfavorecidos, apoyando la formación y el fomento del empleo, ayudando a los emprendedores, rebajando el gasto público superfluo, y buscando la mejor forma de incentivar el comercio y los servicios. Por ello, lo más sensato sería rebajar los impuestos, aliviar la carga que sufren las familias, y promover la creación de empleo, lo que reactivaría el consumo, y podríamos salir más rápidamente de la crisis.
Sin embargo, inexplicablemente, nuestros gobiernos locales, autonómicos y estatal, no están por la labor y hacen todo lo contrario a lo que deberían hacer. De nada sirve que otros países como Alemania o Francia promuevan políticas fiscales de rebajas de impuestos y que éstas estén siendo claves para la recuperación económica de esos países. Aquí, el Partido Socialista, que manda en todas las Administraciones, se cierra en banda, y rechaza sin atender a razones, las propuestas más que sensatas que se le proponen desde la fiel oposición.
En el caso de Castelldefels, el Partido Popular ha propuesto una reforma completa de los impuestos de la ciudad, proponiendo rebajas en todos los impuestos. Por ejemplo, hemos pedido rebajar el IBI, el principal impuesto local, en lugar de subirlo como propone y ha aprobado el gobierno socialista aprovechando la actualización matemática del impuesto. El IBI se ha incrementado exponencialmente en los últimos años en Castelldefels, especialmente a raíz de la revalorización catrastral que en el año 2006 se hizo en nuestra ciudad, el famoso catastrazo. Usted mismo puede comprobarlo si coge sus propios recibos de cada año y comprueba el incremento. ¿Le han subido el sueldo en la misma proporción? Seguro que no!
De este modo, en 2006 se actualizaron los valores de nuestros pisos, casas y locales a los valores máximos de la burbuja inmobiliaria, de modo que ahora, en 2009-10, pagamos impuestos en base a unos valores inflados, ya que las viviendas y locales se han depreciado más de un 30% de su hipotético valor, mientras que los impuestos se han mantenido e incluso subido el IPC anualmente.
Mientras que pagamos (cada vez más) muchos vecinos se quejan de no poder utilizar sus vados por las obras del alcantarillado en Montemar, obras que por cierto avanzan preocupantemente despacio... En el centro del pueblo las obras del Plan-E están haciendo que los clientes no vayan a comprar allí, ya que además del drama que supone aparcar habitualmente, ahora es casi imposible acceder al interior de las tiendas, ya que las aceras están permanentemente levantadas. ¿No sería más sensato levantar y tapar una acera antes de levantar la siguiente? En lugar de crear empleo, el gobierno está destruyendo el poco que queda. No ayudar a nuestros comerciantes locales, supone destruir muchos puestos de trabajo.
Desde el PP creemos que hay que tomar medidas ya, urgentemente. Las familias no pueden seguir aguantando tan elevado coste, y el gobierno debe apostar por crear empleo en lugar de dar subsidios. Las personas queremos poder ser independientes, tener trabajo y no depender de la caridad del prójimo o de la voluntad del gobierno. Señores del gobierno socialista de Castelldefels, por favor actúen. Sus ciudadanos se lo reclamamos. Reflexionen, y corrijan sus errores. Si lo hacen, nos tendrán a su lado, sino no lo hacen, no pararemos de reclamar lo que es justo.
domingo, 20 de septiembre de 2009
Las Ventajas de ser socialista
Cuando un partido político, supuestamente progresista, manda al paro a más de 4 millones de españoles, se dice que la culpa es de la coyuntura económica internacional, y que poco o nada puede hacer el gobierno (da igual que Estados Unidos, Francia o Alemania ya se estén recuperando). Dar cheques de 400 euros para al cabo de un año quitarlos, lo llaman hacer política social. Gastarse el dinero público en levantar aceras sin ser criticado en lugar de solucionar la crisis económica y crear empleo de calidad, es invertir y progresar. Hacer una política desmesurada de gasto público que ha servido para muy poco, y subir los impuestos en 15.000 millones de euros, es supuestamente ser solidario.
Poder decir una cosa, hacer otra, y luego vender una tercera que nada tiene que ver con lo que has dicho o con lo que has hecho, es una virtud que sólo los socialistas poseen. Sin embargo, ser popular no tiene las mismas prerrogativas. Por un lado, te atribuyen lo que no dices. Si dices que hay crisis no eres patriota. Si lanzas una propuesta, eres un oportunista. Si dices que aumentará el paro, eres muy negativo.
Además, ser socialista tiene muchas más ventajas. Mientras que el país se hunde, tú celebras la Festa de la Rosa. Si un ayuntamiento no te gusta, buscas un concejal tránsfuga y lo cambias. Cuando la presión social te pone contra las cuerdas, persigues a la oposición mediáticamente con juicios paralelos como en el caso de Valencia con Camps. Que un alcalde te parece demasiado mayor, lo jubilas a mitad de la legislatura (a caso Padilla no sabía que cumpliría 65 años cuando se presentó a alcalde en el 2007) y pones a otro para promocionarlo aupado por los medios de comunicación municipales… ¿verdad, Sr. Sau?
No obstante, otra de las mayores virtudes de ser socialista es tener presuntamente ventajas para “trepar” en la carrera profesional como funcionario público, o eso al menos, cree mucha gente. Hoy día, demasiados ciudadanos anónimos (por miedo a represalias) ponen en tela de juicio que mediante un decreto de alcaldía se pueda ascender a una persona de categoría (incluso reiteradas veces) sin que se convoque la correspondiente oposición abierta para que puedan concurrir a la plaza todos aquellos que estén capacitados en igualdad de condiciones. Que a esa persona que se pone a dedo (sin dudar de su capacidad y valía) tenga un proceso distinto de ascenso que los demás, que por medio de una oposición y exámenes muy duros ganan la plaza. Es como ir por una autopista de pago, donde unos coches pagan peaje y otros pasan gratis. ¿Es justo? ¿Es lógico mantener ese sistema hoy en día? Y sobretodo, salta la chispa y se generan suspicacias cuando esos que “suben” a dedo son de determinado partido político…siempre del mismo claro.
Cada mañana, miles de españoles al levantarse se les aparece la imagen de un demonio y de un ángel (como en la películas). El demonio malo que se parece a Zapatero les dice: “no te preocupes si no tienes empleo, el Estado paga… sigue durmiendo”. Mientras que el angelito bueno con la barba de Mariano les dice: “preocúpate, debes trabajar, esforzarte y ser constante, por tanto…levántate”. Y aquí el demonio rojo juega con ventaja, ya que es más fácil recibir un falso regalo, que impulsar a una persona para que se base en la cultura del esfuerzo y del mérito como vía real para salir de la crisis.
Poder decir una cosa, hacer otra, y luego vender una tercera que nada tiene que ver con lo que has dicho o con lo que has hecho, es una virtud que sólo los socialistas poseen. Sin embargo, ser popular no tiene las mismas prerrogativas. Por un lado, te atribuyen lo que no dices. Si dices que hay crisis no eres patriota. Si lanzas una propuesta, eres un oportunista. Si dices que aumentará el paro, eres muy negativo.
Además, ser socialista tiene muchas más ventajas. Mientras que el país se hunde, tú celebras la Festa de la Rosa. Si un ayuntamiento no te gusta, buscas un concejal tránsfuga y lo cambias. Cuando la presión social te pone contra las cuerdas, persigues a la oposición mediáticamente con juicios paralelos como en el caso de Valencia con Camps. Que un alcalde te parece demasiado mayor, lo jubilas a mitad de la legislatura (a caso Padilla no sabía que cumpliría 65 años cuando se presentó a alcalde en el 2007) y pones a otro para promocionarlo aupado por los medios de comunicación municipales… ¿verdad, Sr. Sau?
No obstante, otra de las mayores virtudes de ser socialista es tener presuntamente ventajas para “trepar” en la carrera profesional como funcionario público, o eso al menos, cree mucha gente. Hoy día, demasiados ciudadanos anónimos (por miedo a represalias) ponen en tela de juicio que mediante un decreto de alcaldía se pueda ascender a una persona de categoría (incluso reiteradas veces) sin que se convoque la correspondiente oposición abierta para que puedan concurrir a la plaza todos aquellos que estén capacitados en igualdad de condiciones. Que a esa persona que se pone a dedo (sin dudar de su capacidad y valía) tenga un proceso distinto de ascenso que los demás, que por medio de una oposición y exámenes muy duros ganan la plaza. Es como ir por una autopista de pago, donde unos coches pagan peaje y otros pasan gratis. ¿Es justo? ¿Es lógico mantener ese sistema hoy en día? Y sobretodo, salta la chispa y se generan suspicacias cuando esos que “suben” a dedo son de determinado partido político…siempre del mismo claro.
Cada mañana, miles de españoles al levantarse se les aparece la imagen de un demonio y de un ángel (como en la películas). El demonio malo que se parece a Zapatero les dice: “no te preocupes si no tienes empleo, el Estado paga… sigue durmiendo”. Mientras que el angelito bueno con la barba de Mariano les dice: “preocúpate, debes trabajar, esforzarte y ser constante, por tanto…levántate”. Y aquí el demonio rojo juega con ventaja, ya que es más fácil recibir un falso regalo, que impulsar a una persona para que se base en la cultura del esfuerzo y del mérito como vía real para salir de la crisis.
lunes, 20 de julio de 2009
Gracias al gobierno socialista, los vecinos de Castelldefels tendremos que pagar para aparcar en la playa
Como si de un ritual veraniego se tratase, cada fin de semana supone un nuevo caos circulatorio y una auténtica odisea buscar aparcamiento en la playa de Castelldefels. La falta de previsión prolongada en el tiempo para adecuar zonas de aparcamiento cerca de la playa se ha ido agravando año tras año, gracias a la mirada distraída del gobierno socialista que pensaba más en el negocio inmobiliario que supone la construcción de más y más viviendas, en lugar de centrar su atención en crear infraestructuras y equipamientos en el litoral de la ciudad.
De hecho, basta con darse una vuelta por este barrio para comprobar las grandes carencias que sufren los vecinos de la playa, que no sólo no disponen prácticamente de ningún equipamiento básico, sino que además sufren las consecuencias de la mala planificación urbanística y de los problemas de las aglomeraciones estivales.
Pero si la situación ya era grave, ahora cabe sumarle el último gran invento del gobierno tripartito local, encabezado por el alcalde socialista, el cual ha presentado un proyecto que contempla la conversión de todas las plazas de aparcamiento gratuito de superficie del paseo marítimo de Castelldefels, en zona de pago. Esta medida supondrá la implantación de la zona azul y la zona verde en la playa que irá acompañado de un párquing subterráneo entre la plaza del ancla y la calle 5.
El Partido Popular de Castelldefels está totalmente a favor de buscar fórmulas que mejoren y solucionen la grave situación que padecen los ciudadanos de Castelldefels, y los comerciantes y restauradores quienes ven como pierden potenciales clientes debido a la falta de aparcamiento. Ahora bien, un proyecto de semejante magnitud requiere previamente del consenso no sólo de las principales fuerzas políticas de la ciudad, sino de la activa participación de los vecinos y los comerciantes afectados. Dicha participación, como es habitual, no se ha producido. ¿A quién le han preguntado? El órgano de consulta por excelencia para este tipo de proyectos es el Consejo Territorial, en este caso de la playa, donde participan los partidos políticos, asociaciones de vecinos y de comerciantes y otras entidades que pueden aportar su granito de arena para que la solución no se convierta en un nuevo problema que se sume al abultado número de temas pendientes de esta ciudad. Sin embargo, y a pesar de la obligatoriedad de convocar los consejos territoriales, el gobierno socialista de Castelldefels, se salta a la torera los reglamentos y no los convoca -el de la playa lleva más de dos años sin reunirse…- ¿A caso no hay temas pendientes de tratar o de solucionar en la playa?
Apreciados ciudadanos, un párquing subterráneo de rotación en el paseo marítimo puede ser un buen proyecto que mejore el comercio local en la playa. Nosotros llevamos años proponiéndolo. No obstante, la implantación de un sistema de pago en toda la playa, puede producir el efecto contrario al deseado. Puede provocar que los turistas dejen de venir a nuestra playa, y que además, los vecinos tengamos que pagar un nuevo impuesto encubierto como es la zona verde. El Partido Popular pide diálogo y consenso. Todos deben dar su opinión y tienen derecho a ser escuchados, especialmente, quienes viven y trabajan en la playa. Señor alcalde, desde el PP le pedimos que haga gala de eso que algunos llaman buen talante y convoque a todas las partes implicadas. Señor alcalde, todavía está a tiempo de enmendar sus errores. La sabiduría popular reconoce que rectificar es de sabios. Aplíquese el consejo.
De hecho, basta con darse una vuelta por este barrio para comprobar las grandes carencias que sufren los vecinos de la playa, que no sólo no disponen prácticamente de ningún equipamiento básico, sino que además sufren las consecuencias de la mala planificación urbanística y de los problemas de las aglomeraciones estivales.
Pero si la situación ya era grave, ahora cabe sumarle el último gran invento del gobierno tripartito local, encabezado por el alcalde socialista, el cual ha presentado un proyecto que contempla la conversión de todas las plazas de aparcamiento gratuito de superficie del paseo marítimo de Castelldefels, en zona de pago. Esta medida supondrá la implantación de la zona azul y la zona verde en la playa que irá acompañado de un párquing subterráneo entre la plaza del ancla y la calle 5.
El Partido Popular de Castelldefels está totalmente a favor de buscar fórmulas que mejoren y solucionen la grave situación que padecen los ciudadanos de Castelldefels, y los comerciantes y restauradores quienes ven como pierden potenciales clientes debido a la falta de aparcamiento. Ahora bien, un proyecto de semejante magnitud requiere previamente del consenso no sólo de las principales fuerzas políticas de la ciudad, sino de la activa participación de los vecinos y los comerciantes afectados. Dicha participación, como es habitual, no se ha producido. ¿A quién le han preguntado? El órgano de consulta por excelencia para este tipo de proyectos es el Consejo Territorial, en este caso de la playa, donde participan los partidos políticos, asociaciones de vecinos y de comerciantes y otras entidades que pueden aportar su granito de arena para que la solución no se convierta en un nuevo problema que se sume al abultado número de temas pendientes de esta ciudad. Sin embargo, y a pesar de la obligatoriedad de convocar los consejos territoriales, el gobierno socialista de Castelldefels, se salta a la torera los reglamentos y no los convoca -el de la playa lleva más de dos años sin reunirse…- ¿A caso no hay temas pendientes de tratar o de solucionar en la playa?
Apreciados ciudadanos, un párquing subterráneo de rotación en el paseo marítimo puede ser un buen proyecto que mejore el comercio local en la playa. Nosotros llevamos años proponiéndolo. No obstante, la implantación de un sistema de pago en toda la playa, puede producir el efecto contrario al deseado. Puede provocar que los turistas dejen de venir a nuestra playa, y que además, los vecinos tengamos que pagar un nuevo impuesto encubierto como es la zona verde. El Partido Popular pide diálogo y consenso. Todos deben dar su opinión y tienen derecho a ser escuchados, especialmente, quienes viven y trabajan en la playa. Señor alcalde, desde el PP le pedimos que haga gala de eso que algunos llaman buen talante y convoque a todas las partes implicadas. Señor alcalde, todavía está a tiempo de enmendar sus errores. La sabiduría popular reconoce que rectificar es de sabios. Aplíquese el consejo.
viernes, 20 de marzo de 2009
La Revista Municipal El Castell, propaganda electoral
A medida que va avanzando la legislatura hemos ido contemplando atónitos las supuestas bondades y virtudes de las que el equipo de gobierno de Castelldefels alardea con su propio autobombo en la revista municipal El Castell; la revista que pagamos todos los ciudadanos de esta ciudad, y de la que unos cuantos parecen utilizarla con usos partidistas.
Les daremos un ejemplo como muestra. La actual biblioteca de Castelldefels, situada desde hace muchos años debajo de un polideportivo con los problemas de acústica que ello conlleva, no ha sido objeto de mejora alguna para paliar el problema que les supone a sus usuarios y a los estudiantes que tratan de buscar en ella un espacio de silencio. Ello ha provocado muchas quejas, e incluso una moción que presentó el PP a principio de esta legislatura. El equipo de gobierno socialista se ha excusado siempre en no acondicionar mínimamente la actual y única biblioteca con el pretesto de que pronto se tendrá la nueva lista. Sin embargo, los años van pasando y tenemos que soportar asiduamente en la revista municipal El Castell como se nos vende una y otra vez el mismo proyecto del cual todavía no se ha colocado ni una sola piedra. De hecho, en la revista del mes de marzo de este año, aparece la nueva biblioteca en portada y en páginas interiores, como también sucediese en páginas interiores en las revistas de marzo, junio, septiembre, noviembre y diciembre de 2008 donde se referencia constantemente a la nueva biblioteca.
Otro ejemplo lo tenemos con la posible urbanización de Ca N’Aimeric. Se nos ha contado ya, por activa y por pasiva, que se construirá un centro educativo y un ambulatorio. Señores del gobierno municipal, menos palabrería y más acción. No nos cuenten historias de lo que van a hacer, y pónganse manos a la obra con unos equipamientos que no sólo llegan con muchos años de retraso, sino que además, continuaran siendo insuficientes ya que desde que se lo piensan hasta que los construyen, pasa tanto tiempo que provoca que los equipamientos queden saturados desde el mismo momento en que se ponen por primera vez en funcionamiento.
Volviendo a El Castell, decirles que cuenta con una tirada de 24.000 ejemplares los cuales se distribuyen en todos los domicilios de la ciudad. Realmente, ¿es necesario una revista mensual con un número tan amplio de ejemplares?¿Cuánto cuesta la impresión y el reparto de la misma?
Por último, el Partido Socialista decide cambiar el alcalde de la ciudad porque le conviene electoralmente. Queridos lectores, sino conocen todavía a su nuevo alcalde, pueden estar tranquilos que gracias a El Castell (entre otros medios municipales) tendrán la oportunidad de conocerlo sobradamente ya que durante los dos próximos años, la revista municipal se encargará “gratuitamente” de presentarles hasta en la sopa al futuro candidato del PSC para las siguientes elecciones municipales de 2011.
Les daremos un ejemplo como muestra. La actual biblioteca de Castelldefels, situada desde hace muchos años debajo de un polideportivo con los problemas de acústica que ello conlleva, no ha sido objeto de mejora alguna para paliar el problema que les supone a sus usuarios y a los estudiantes que tratan de buscar en ella un espacio de silencio. Ello ha provocado muchas quejas, e incluso una moción que presentó el PP a principio de esta legislatura. El equipo de gobierno socialista se ha excusado siempre en no acondicionar mínimamente la actual y única biblioteca con el pretesto de que pronto se tendrá la nueva lista. Sin embargo, los años van pasando y tenemos que soportar asiduamente en la revista municipal El Castell como se nos vende una y otra vez el mismo proyecto del cual todavía no se ha colocado ni una sola piedra. De hecho, en la revista del mes de marzo de este año, aparece la nueva biblioteca en portada y en páginas interiores, como también sucediese en páginas interiores en las revistas de marzo, junio, septiembre, noviembre y diciembre de 2008 donde se referencia constantemente a la nueva biblioteca.
Otro ejemplo lo tenemos con la posible urbanización de Ca N’Aimeric. Se nos ha contado ya, por activa y por pasiva, que se construirá un centro educativo y un ambulatorio. Señores del gobierno municipal, menos palabrería y más acción. No nos cuenten historias de lo que van a hacer, y pónganse manos a la obra con unos equipamientos que no sólo llegan con muchos años de retraso, sino que además, continuaran siendo insuficientes ya que desde que se lo piensan hasta que los construyen, pasa tanto tiempo que provoca que los equipamientos queden saturados desde el mismo momento en que se ponen por primera vez en funcionamiento.
Volviendo a El Castell, decirles que cuenta con una tirada de 24.000 ejemplares los cuales se distribuyen en todos los domicilios de la ciudad. Realmente, ¿es necesario una revista mensual con un número tan amplio de ejemplares?¿Cuánto cuesta la impresión y el reparto de la misma?
Por último, el Partido Socialista decide cambiar el alcalde de la ciudad porque le conviene electoralmente. Queridos lectores, sino conocen todavía a su nuevo alcalde, pueden estar tranquilos que gracias a El Castell (entre otros medios municipales) tendrán la oportunidad de conocerlo sobradamente ya que durante los dos próximos años, la revista municipal se encargará “gratuitamente” de presentarles hasta en la sopa al futuro candidato del PSC para las siguientes elecciones municipales de 2011.
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